Curso Los Padres. Nuestros Maestros de Crecimiento Personal.

Sábado 22 de noviembre de 10 a 19 horas, con pausa de 2 horas para la comida.

 

Domingo 23 de noviembre de 10 a 14 horas.

El vínculo que mantenemos con nuestros progenitores nos marca profundamente durante toda nuestra existencia, ya que tomamos de ellos no sólo la carga genética, sino también la emocional.

 

Energéticamente, somos un 50% energía de nuestro Padre y un 50% energía de nuestra Madre.

 

La forma en que nuestros padres se relacionan entre sí, con los demás y por supuesto, con nosotros, nos afecta notablemente, y eso lo proyectamos en otras relaciones.

 

Una persona no puede vivir sin el vínculo de sus progenitores, aunque haya pasado alguna circunstancia difícil o trágica con ellos. Por ejemplo, personas que no han conocido a su padres porque murieron, los abandonaron, o fueron separados porque sus vidas corrían peligro porque padecían alguna enfermedad mental, adicción, o abusaban de ellas.

 

Un niño pequeño siempre quiere a sus padres, ya que los necesita para sobrevivir, y si éstos no están disponibles, los buscará en personas de su entorno, y en su madurez, lo hará igualmente en su pareja principalmente, pero también en hermanos, amigos, jefes, compañeros de trabajo, etc.

 

"Entonces, si miro a mi madre y a una fuerza más grande, vemos que la madre es dada tal y como es, el padre es dado tal y como es. Y sólo me queda tomarlos como son. Poco importa lo que han hecho, no interfiere aquí, pues tal y como son, han sido mis padres para mí, y se transforman en mi destino, el destino tal y como me es designado".

Bert Hellinger.

 

Es importante diferenciar entre vínculo y relación. Sanar el vínculo con nuetros progenitores padres, significa que haya pasado lo que haya pasado, somos capaces desde nuestro Estado Adulto de la personalidad, honrarlos y tomarlos en nuestra alma, reconociendo que ambos nos han dado la vida, y si entendemos, que el mantener una relación con ellos en este momento, no nos beneficia, podemos optar por no verlos, pero no desde el rechazo, sino desde la aceptación a todo tal y como es.

 

Podemos elegir no mantener una relación con ellos, pero siempre serán nuestros padres. Es algo que nunca podremos cambiar.

 

Si rechazamos a nuestro padre o a nuestra madre, inconscientemente decimos "No quiero vivir", porque rechazamos la vida que nos llega a través de ellos, y todo lo que eso conlleva: pareja, trabajo, realización profesional, dinero, abundancia, éxito, salud.

 

"Las exigencias hacia los padres van en contra de la vida, del deseo de evolucionar, de ser creativo. Sólo podemos evolucionar gracias a que nuestros padres han sido imperfectos. Las dificultades son la fuente de la fuerza que nos hace actuar y evolucionar.

 Por lo tanto ¡Dichosos los que han tenido padres imperfectos!

Bert Hellinger.

 

En este encuentro presencial, eminentemente práctico y vivencial, trabajaremos con visualizaciones, ejercicios sistémicos y constelaciones familiares, para sanar o reforzar el vínculo con nuestros progenitores, entendiendo que ellos son personas normales, que viven o vivieron conforme a sus historias, experiencias y cultura. Tomando conciencia que es muy importante, tomar su energía y la de su linaje materno y paterno para estar disponibles para nuestra vida y ser felices. Eso es lo que quieren todos los padres para sus hijos. También es lo que necesitan nuestros ancestros.

 

Trabajaremos también con el vínculo con los hijos y hermanos, para realizar un trabajo profundamente sanador en el seno familiar.

 

Aportación: 150 euros.

 

Información e Inscripciones a través del correo electrónico:

aquaaura-madrid@outlook.com